domingo, 25 de enero de 2015

Como el hombre de Tiananmen.




      Sentí lo que sentí  pará, por que  moverte no puedes y si no te has echao ya pa yá, te quedas esperando lo que fuera a ser,  así… la muerte pasara. Delante del tanque miré su cara, que aunque te quiebre la vida, aunque sea el último café, jugársela es a veces la única salida… la sangre en la frente me hizo caer.  En ocasiones el coraje te gana y te deja quieta esperando, porque no puedes rendirte ante el tipo que te lanzó la pedrá.

 

Cuando la suerte qu’es grela
Fayando y fayando
Te largue parao..


© Edith Lasal





3 comentarios:

  1. Ese echar para delante, ni importa el obstáculo, así en ello se vaya la vida. Un abrazo. Carlos

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